Empleo
POR TERESA DE LA CRUZ
Gestora de proyectos del Zaragoza Logistics Center
Durante las últimas tres décadas, la logística ha experimentado una transformación sin precedentes. Partiendo de un papel puramente operativo que reportaba a ventas o a fabricación, hoy en día la logística ha adquirido un carácter estratégico pasando a desempeñar un rol independiente y, en algunas empresas, a ser supervisada por un director de la cadena de suministro. La digitalización ha sido clave en este proceso de transformación a lo largo de los años, que ha ido evolucionando desde la tercera hasta la cuarta revolución industrial.
Fuente: Christoph Roser en AllAboutLean.com, bajo licencia gratuita CC-BY-SA 4.0.
La logística disruptiva, también conocida como industria 4.0, ha convertido la transformación digital en una práctica habitual, revolucionando numerosos sectores industriales. El uso de tecnologías disruptivas ha facultado dar un salto en campos como las tecnologías de la información, la comunicación, la conectividad, el análisis y la computación. Algunos ejemplos de estos avances se han materializado con la nueva generación de comunicaciones y redes (5G), el internet industrial de las cosas (IIoT), la inteligencia artificial (IA), el aprendizaje automático, el análisis predictivo y la computación en la nube.
La relevancia de la logística y la cadena de suministro en la industria 4.0 se hace patente en el concepto de internet física (PI, por sus siglas en inglés), un sistema mundial de transporte de mercaderías que funcionaría como internet. Este paradigma se ha desarrollado para lograr un sistema de logística global que tendría como propósito mover, manipular, almacenar y transportar productos de manera sostenible y eficiente. Para conseguir este objetivo, la internet física requiere un mayor nivel de interconectividad e interoperabilidad en términos físicos, informativos y operativos. Emulando el principio de la internet digital, la internet física se lograría a través de una red interconectada de terminales intermodales, protocolos colaborativos y contenedores inteligentes, modulares y estandarizados.
En la actualidad, las cadenas de suministro se enfrentan a desafíos sin precedentes. La apuesta por la internet física permitiría a las empresas aumentar las ventas, disminuir costos, mejorar el servicio al cliente, tomar decisiones en tiempo real y llevar a cabo una gestión más eficiente, resiliente y consistente. Las últimas tendencias digitales han tenido un impacto indiscutible en la logística porque han reducido la dependencia de los procesos manuales y el margen de error que conllevan.
Aceleración digital
La democratización de tecnologías emergentes se disparó entre 2018 y 2020. Un informe del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) revela que el interés por tecnologías como la IA (inteligencia artificial) está creciendo a pasos acelerados: el 62% de las organizaciones participantes en el estudio reconocieron que en 2020 habían elevado la inversión en proyectos de IA en comparación con el año anterior. La pandemia hizo que las empresas pusieran el foco en los cambios digitales, obligando a muchas compañías a reinventarse e impulsar su transición hacia la digitalización.
Otro estudio de Capgemini Research Institute muestra que el 68% de las organizaciones cree que la COVID-19 ya ha acelerado o acelerará las iniciativas de transformación digital en sus empresas. Todos los sectores han avanzado en su apuesta por la digitalización, aunque la adopción de la tecnología es desigual. En 2020, el comercio minorista superó a todos los demás sectores: el 73% de las compañías afirmó tener las capacidades digitales necesarias para la transformación, frente al 37% en 2018. Los minoristas que reconocieron el alza de la demanda de los consumidores online y emprendieron una estrategia e-commerce proactiva lideraron este crecimiento hacia la digitalización.
Fuente: Digital Mastery 2020: Cómo las organizaciones han progresado en sus transformaciones digitales en los últimos dos años (Capgemini Research Institute).
Adopción de tecnologías en la cadena de suministro
En un futuro cercano, se extenderá la adopción de tecnologías que fomenten la digitalización de la cadena de suministro, así como de tecnologías que mejoren la toma de decisiones. Por ejemplo, para 2026, la consultora Gartner predice que el 75% de las grandes empresas habrá incorporado algún tipo de robot inteligente de intralogística en las operativas de sus depósitos. Estos robots permiten automatizar ciertos procesos con el propósito de complementar la fuerza humana. En comparación con los métodos de automatización más convencionales, como los sórteres con transportadores de cajas o los vehículos de guiado automático, la implementación de robots es más rápida y menos costosa.
Las cadenas de suministro tradicionales funcionan según reglas basadas en datos históricos, mientras que las cadenas de suministro integradas con tecnologías digitales operan en tiempo real. Durante décadas, las empresas se han embarcado en modernizar sus cadenas de suministro invirtiendo grandes cantidades de dinero en sistemas ERP (Enterprise Resource Planning) para lograr eficiencia y reducir costos. Estos sistemas deberían haber preparado a las organizaciones ─o sentado las bases─ para gestionar y aminorar las consecuencias de las disrupciones en la cadena de suministro. Sin embargo, los sistemas ERP podrían haber agravado los problemas derivados de las interrupciones, porque están diseñados para negocios estáticos. Existen opciones más eficaces para gestionar las disrupciones, como, por ejemplo, nuevas plataformas tecnológicas que posibilitan que los usuarios adapten sus cadenas de suministro a través de aplicaciones que utilizan herramientas como la IA o el aprendizaje automático e integran datos de dispositivos IoT.
Según Gartner, en 2026 el 75% de las grandes empresas habrán incorporado algún tipo de robot inteligente en sus depósitos
Madurez digital
La transformación digital puede describirse como el conjunto de procesos sistémicos requeridos para aplicar tecnologías digitales. La digitalización utiliza datos, información e inteligencia a fin de acrecentar el rendimiento y la capacidad de las empresas para adecuarse rápidamente a los cambios disruptivos generados en el entorno.
El concepto de madurez digital engloba dos atributos. El primero hace referencia a las capacidades digitales que poseen las empresas para sacar adelante iniciativas tecnológicas. El segundo alude a las capacidades de gestión que impulsan la transformación digital, es decir, el liderazgo, la cultura empresarial, la gestión del cambio y la gobernanza. Las empresas con aptitudes digitales sólidas que carecen de capacidades para gestionar la transformación se denominan “fashionistas”, mientras que las empresas con capacidad para gestionar la transformación y un bajo conocimiento digital se denominan “conservadoras”.
Las empresas logísticas se enfrentan a múltiples retos cuando implantan innovaciones tecnológicas en sus organizaciones. Los desafíos incluyen desde la propia complejidad del sistema logístico y los procesos subyacentes, hasta la falta de recursos especializados, la capacidad de adopción de tecnologías, la resistencia al cambio (tanto institucional como individual) y las infracciones de seguridad/protección de datos.
Un informe de DHL pone de manifiesto que la gran mayoría de los trabajadores de logística creen en la utilidad de la tecnología y son partidarios de incrementar su uso para respaldar sus funciones. Si bien la tecnología se considera beneficiosa, la mayoría de los operarios y personal de oficina sienten inquietud ante los futuros avances en automatización e IA. No obstante, los responsables logísticos opinan que el período de cambio será gradual y que en los próximos 30 años veremos cada vez más roles que colaborarán con la tecnología en lugar de competir con ella. La digitalización ofrece una amplia gama de oportunidades laborales para los trabajadores más cualificados, así como para los que sean capaces de adaptarse a las nuevas habilidades que demandará el mercado. Los trabajadores con menos habilidades deberán integrarse en el proceso de digitalización y mejorar sus aptitudes.
El desafío que conlleva la implementación de tecnología no solo afecta a los trabajadores, sino también a los responsables logísticos, que tienen que afrontar la escasez de habilidades y la necesidad de apoyar a los operarios para que se amolden a nuevos procesos de producción y prestación de servicios.
Factores de éxito para la transformación digital
Los principales factores de éxito que impulsan la digitalización son el liderazgo, una cultura empresarial que favorezca la transformación, el compromiso de los empleados y socios en el proceso, y que los equipos de IT y de operaciones trabajen juntos con una visión y objetivos comunes. El buen liderazgo es un aspecto crucial que puede potenciar los demás factores de éxito. En este contexto, los líderes son vistos como orquestadores del cambio, capaces de inspirar y motivar a las personas a desempeñar un papel activo en el proceso de transformación digital.
En un contexto más amplio, la transformación digital puede fomentarse a través de iniciativas pioneras, bien definidas y cuantificables que actúan como propulsoras de proyectos adicionales de naturaleza similar. Para que estas iniciativas de transformación se materialicen, las empresas deben promover proyectos potencialmente beneficiosos y con un riesgo razonable que faciliten el apoyo de las partes interesadas. Este es el caso de las empresas industriales que participan en proyectos de investigación e innovación financiados por la UE. Por ejemplo, el proyecto PLANET investiga nuevas formas de coordinar cadenas de suministro complejas a través de corredores multimodales en los que participan partes interesadas públicas y privadas. Del proyecto han surgido tres Living Labs (bancos de pruebas donde los usuarios pueden cocrear innovaciones) que implementan tecnologías y conceptos de la internet física y conectan diferentes corredores TEN-T (Red Transeuropea de Transporte) con China mediante rutas marítimas y ferroviarias. Entre otros objetivos, PLANET pretende mejorar la capacidad predictiva, la planificación y el enrutamiento a fin de rebajar costos operativos, emisiones de CO2 e interrupciones en la cadena de suministro. El proyecto europeo también investiga cómo tomar decisiones colaborativas más rápidas y cómo incrementar la visibilidad de extremo a extremo en la cadena de suministro.
La digitalización, fuente de ventaja competitiva
Las empresas incorporan nuevas tendencias tecnológicas en un esfuerzo por fortalecer sus procesos y su competitividad. Los líderes del sector industrial son conscientes de que la tecnología, tanto emergente como consolidada, se ha convertido en una fuente importante de ventaja competitiva. De hecho, las empresas más avanzadas en digitalización obtienen un rendimiento financiero significativamente superior al de sus pares. Las organizaciones que modernicen sus sistemas heredados e incorporen nuevas propuestas tecnológicas en sus procesos estarán más preparadas para adaptarse a los avances del futuro.
En un entorno industrial tan cambiante, los planes de estudio son también cruciales para hacer frente a los nuevos desafíos. Una transformación digital exitosa contempla la tecnología como un medio y no como un fin, y se basa en una estrategia personalizada acorde a la madurez digital de la organización que la implementa.
La Dra. Teresa de la Cruz es project manager de la oficina de investigación del Zaragoza Logistics Center, donde lleva a cabo la gestión de proyectos e investigación en áreas como la movilidad urbana, la sostenibilidad de la cadena de suministro y los sistemas de transporte.
Referencias
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