Cadena de suministro sostenible para minimizar el impacto medioambiental

Una cadena de suministro sostenible es la que provee productos y servicios que satisfacen a los clientes procurando producir el mínimo impacto medioambiental posible y operando de una forma socialmente responsable.

El cambio climático es una de las mayores amenazas del siglo XXI y, como tal, preocupa a las empresas y a la población. Por ese motivo, las compañías buscan soluciones que minimicen las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera en cualquiera de sus operativas (por ejemplo, promoviendo una logística verde).

En este artículo, veremos cómo el uso responsable y sostenible de los recursos de una cadena de suministro redunda en una disminución de los costos y supone una gran oportunidad para las empresas que quieran mejorar sus relaciones comerciales y fidelizar a sus clientes.

Qué es una cadena de suministro sostenible

Una cadena de suministro sostenible es aquella que intenta minimizar el impacto medioambiental y social adverso en todas sus etapas, desde la fabricación de un producto y su almacenamiento hasta su entrega al cliente.

¿Cómo se consigue? Según el estudio State of Supply Chain Sustainability 2020 del Massachusetts Institute of Technology (MIT), mediante una gestión sostenible de los recursos (energía, agua, materias primas…) y con la utilización de energías renovables.

Para ello, se necesita la colaboración de todos los actores que intervienen en la cadena de suministro, desde los proveedores de materias primas, envases y embalajes hasta los transportistas, responsables de la distribución de los pedidos. Todos ellos deben sincronizar esfuerzos, fomentando acciones concretas como la utilización de materias primas de origen sostenible o la racionalización de los recursos empleados.

Ventajas de una cadena de suministro sostenible

Contribuir a la sostenibilidad de la cadena de suministro proporciona importantes beneficios:

• Disminución de costos. Las empresas que reutilizan materias primas consiguen reducir gastos de forma significativa.
• Mejora de la imagen corporativa. Según un estudio sobre consumo que realizó la empresa tecnológica IBM, seis de cada diez consumidores encuestados están dispuestos a cambiar sus hábitos de compra con tal de rebajar el impacto medioambiental. Por tanto, las empresas que estén verdaderamente preocupadas por el medio ambiente, y actúen en consecuencia, ganarán en reputación y serán más competitivas.
• Innovación y progreso. La estrategia de sostenibilidad en la cadena de suministro consiste en implementar nuevos procesos y en rediseñar distintas prácticas organizativas. Como consecuencia, se pueden perfeccionar productos y descubrir nuevas oportunidades de negocio, lo que contribuye al progreso y a la innovación de las empresas.

Resulta evidente que la cadena de suministro sostenible ha dejado de ser una mera cuestión de imagen para convertirse en una necesidad y en una estrategia que proporciona beneficios a las empresas, además de mejorar su relación con el entorno y la sociedad.

3 acciones para implementar una cadena de suministro sostenible

Una cadena de suministro sostenible debe garantizar la eficiencia, las mejores prácticas y la transparencia en cada uno de sus eslabones. Para lograrlo, pueden aplicarse las siguientes acciones:

Visibilidad de las operativas

El primer paso para aplicar cualquier cambio en la cadena de suministro pasa conseguir una visibilidad absoluta de todo lo que ocurre dentro y fuera del depósito.

¿Cómo obtener esa visibilidad? Con la ayuda de la digitalización. Por ejemplo, un sistema de gestión de depósitos hace un seguimiento de todos los procesos que tienen lugar en un centro logístico. Así, puede conocerse el estado de las distintas operativas del depósito, algo fundamental para evaluar su impacto y poder optimizarlas.

Un SGA avanzado dispone de módulos que examinan los indicadores de rendimiento con más detalle. En el caso de Easy WMS de Mecalux, se trata de Supply Chain Analytics Software, un programa que ofrece datos útiles sobre las principales actividades del depósito. Basándose en esa información, el jefe de depósito es capaz de introducir mejoras estratégicas destinadas a aumentar la productividad y la sostenibilidad.

Lo idóneo sería que las empresas que conforman una misma cadena de suministro (proveedores de materias primas o de envases, operadores logísticos, etc.) empleasen estas herramientas en sus instalaciones logísticas.

Centralización

Reunir toda la mercadería en un mismo espacio es otra estrategia orientada a la creación de una cadena de suministro sostenible, puesto que de ese modo se evita el movimiento continuo de camiones entre distintas instalaciones.

Un buen ejemplo que demuestra la eficacia de esta práctica es el de la empresa italiana Bomi Group, operador 3PL de productos médicos y farmacéuticos que decidió agrupar la mercadería en un único depósito equipado con racks selectivos y estanterías para picking de Mecalux. Gracias a esta decisión, la firma ha disminuido sus emisiones de CO2 en alrededor de 60 toneladas anuales, que eran generadas por el elevado número de camiones obligados a desplazarse entre los varios depósitos de la compañía.

Automatización del depósito 

La tecnología ayuda a las compañías a optimizar la sostenibilidad en la cadena de suministro, ya que les permite aprovechar mejor los recursos y contaminar menos.

Los equipos de manutención automáticos como transelevadores o transportadores son energéticamente eficientes. Al prescindir de gas y otros combustibles fósiles altamente contaminantes, minimizan las emisiones de CO2 a la atmósfera.

Los transelevadores para pallets de Mecalux, por ejemplo, están dotados de un motor eléctrico IE3 de alta eficiencia y de regeneradores de energía que devuelven a la red eléctrica la energía generada durante las maniobras de descenso y deceleración. Si bien la cantidad de energía regenerada dependerá del peso desplazado y de la altura del transelevador, se estima un ahorro medio de entre un 15% y un 20% en el consumo energético total de una máquina.

Colaboración y comunicación para una cadena de suministro sostenible
 

Una logística sostenible requiere que los distintos depósitos y centros logísticos apliquen buenas prácticas organizativas y se esfuercen por promover un uso racional y responsable de los recursos con vistas a minimizar el impacto medioambiental y social adverso asociado a sus actividades. Para alcanzar este objetivo, es indispensable una estrecha colaboración entre todos los actores que intervienen en la cadena de suministro.

Desde un punto de vista logístico, la automatización es una de las soluciones que mejores resultados proporcionan a la hora de consolidar una cadena de suministro sostenible. Mecalux posee una larga trayectoria poniendo en marcha este tipo de instalaciones, contacta con nosotros para que te expliquemos cómo lograr un depósito eficiente que pueda minimizar el impacto medioambiental.