Just-in-case, la alternativa logística al JIT
El just-in-case (JIC) es una estrategia de gestión de stock cuya principal característica es que las empresas disponen de inventario suficiente para cubrir toda clase de eventualidades. Funciona en contraposición directa al método just-in-time (JIT), con el que se fabrica y almacena según llegan los pedidos.
Entonces, ¿es mejor reducir costos de almacenamiento a riesgo de no servir algunos pedidos o bien asegurar todos los pedidos a cambio de una mayor inversión en almacenaje? En este artículo analizamos qué es exactamente la estrategia just-in-case, cuáles son sus principales diferencias con el método just-in-time y cómo implementarla en un depósito.
¿Cómo funciona la logística 'just-in-case'?
La estrategia de gestión de inventario just-in-case (JIC) consiste en producir, abastecer o almacenar materia prima y bienes terminados por adelantado, disponiendo de existencias suficientes en todo momento. El inventario excedente se guarda en los depósitos de la compañía, con lo que se evitan posibles roturas de stock si se producen disrupciones en la cadena de suministro.
El método just-in-case facilita tener stock disponible ante volúmenes de demanda inesperados, pues el depósito cuenta con reservas suficientes para satisfacer los nuevos pedidos. La producción JIC se conoce también como sistema de producción push y se caracteriza por los costos de fabricación son más bajos debido a que se puede producir por adelantado y a gran escala. Por ejemplo, un sector que emplea habitualmente el just-in-case es el farmacéutico, ya que trabaja con un producto fácil de almacenar por sus pequeñas dimensiones y cuya rotura de stock podría acarrear graves consecuencias para la salud de la comunidad.
Este método se contrapone al just-in-time (JIT), que se fundamenta en una estrategia reactiva ante la demanda del cliente: la compañía tan solo produce el producto en función de los pedidos del consumidor (sistema pull), sin mantener un stock de seguridad. Si bien la producción just-in-time permite disminuir los costos almacenamiento ―al no haber excedente―, la empresa que implanta este método tiende a ser más vulnerable ante aumentos inesperados de la demanda, disrupciones en la cadena de suministro o errores en la planificación logística.
Ventajas (y desventajas) del 'just-in-case' en la 'supply chain'
El método just-in-case asume la sobreproducción de bienes a cambio de garantizar la disponibilidad de stock en cualquier momento. Suele implementarse en compañías donde la previsión de la demanda es compleja, bien por las características del sector o por alguna coyuntura concreta (falta de operarios, problemas de abastecimiento…)
En ese sentido, este método de gestión de stock destaca por:
- Contar con un amplio stock de seguridad: las compañías se aseguran poder servir todos los pedidos y no decepcionar a ningún cliente.
- Planificar los gastos: el JIC permite una mejor planificación de los gastos como el de transporte, al poder preparar con antelación ciertas etapas como la producción o el envío a clientes.
- Gestionar eficientemente los picos de demanda: en caso de un cambio drástico en las tendencias de consumo, la empresa puede responder con más prontitud que su competencia y afianzar su posición en el mercado.
La principal desventaja del método just-in-case es que implica asumir unos costos de almacenaje superiores al just-in-time, lo que puede resultar un grave problema en compañías con heterogeneidad de unidades de carga, con productos de tamaño irregular o que operen con mercadería perecedera.
Cómo implementar una estrategia 'just-in-case'
Para implementar un sistema just-in-case, es necesario disponer de un depósito ordenado, en el que todo esté en su sitio, en particular cuando el volumen de stock es elevado. En ese sentido, es imprescindible apostar por un software que automatice la gestión de las ubicaciones. Un sistema como Easy WMS de Mecalux garantiza un control sobre la trazabilidad del producto y evita los errores en el picking. “Nos urgía un software con el que pudiéramos controlar la mercadería con total precisión”, sintetiza David Garcia, jefe de depósito de Samaniego, una compañía española especializada en salud animal que recientemente ha implementado Easy WMS en sus instalaciones.
Asimismo, un depósito en el que se aplique la estrategia de inventario just-in-case requiere de un layout específico, que posibilite almacenar mercadería sin que ello interfiera en las rutas de picking de los operarios. Ese es el caso, por ejemplo, de la compañía Alliance Healthcare, cuyo nuevo depósito ha sido equipado por Mecalux. El centro logístico posee estanterías de picking dinámico que compactan la mercadería y permiten almacenar cajas de reserva en los propios canales. Además, estas estanterías se combinan en la parte superior con racks selectivos donde se guardan estas referencias, almacenadas en pallets.
En cualquier caso, es posible automatizar el picking para abastecer a las ubicaciones, lo que es especialmente útil en depósitos con un elevado volumen de entradas y salidas de mercadería. Así, las compañías que apliquen el método just-in-case y que cuenten con una alta demanda de producto pueden apostar por sistemas de transporte y almacenamiento automáticos. En combinación con un WMS, estas soluciones permiten ejerer un control exhaustivo del stock, a la vez que agilizan el flujo de mercaderías dentro del depósito.
Una logística preparada para todo momento
El just-in-case evita escenarios vulnerables ante disrupciones de la cadena de suministro. Esta estrategia logística posibilita contar con stock disponible para expedir cualquier pedido, aunque aumenta los costos de almacenaje. Si bien el just-in-time reduce significativamente estos costos, expone a la empresa a que cualquier contratiempo logístico pueda dañar la relación entre esta y el cliente. Es por este motivo que no existe una estrategia mejor que otra.
En definitiva, no hay un sistema de producción y almacenamiento ideal, sino que la estrategia logística de cada compañía dependerá de su planificación y de las características de sus existencias: tipo de producto o de consumidor, instalaciones,etc. La organización debe hacer una reflexión sobre los beneficios y peligros que los diferentes sistemas de producción y almacenaje conllevan para su estrategia logística.
Si tienes dudas sobre cómo afrontar tu gestión de inventario, no dudes en contactar con Mecalux, proveedor integral de soluciones logísticas: desde un potente sistema de gestión de depósitos como Easy WMS hasta soluciones de compactación que te permitirán implantar el método just-in-case con eficiencia.